En qué consiste y cómo puntúa la EvAU en España en 2021

Silvia Gutierrez

Introducción a la EvAU en España

Cuando un alumno se encuentra cursando Secundaria ve muy lejana la EvAU, pero antes de que se haya dado cuenta, se despierta una mañana hecho un manojo de nervios con el DNI y los bolígrafos preparados sobre la mesa de estudio, junto a la mochila en la que lleva los apuntes para el último repaso y se dirige a la Universidad que le corresponde para realizar el primer examen de la prueba.

Retrocedamos en el tiempo. Volvamos a 4º de E.S.O. Este curso es importante en el alumnado ya que se presenta el momento de tomar una ruta hacia el futuro y la primera decisión es plantearse si quiere ir a la Universidad o no. En caso afirmativo es importante elegir el itinerario correcto que derivará en el requisito que debe superar todo alumno para poder acceder a la universidad: la EvAU. La primera elección es si va a acceder por la vía del Bachillerato o a través de la Formación Profesional.

¿Qué es la EvAU?

La EvAU significa Evaluación para el Acceso a la Universidad.

¿Cuándo es la EvAU?

Este es el término utilizado en la Comunidad de Madrid para definir una prueba que comprende una secuencia de exámenes repartidos a lo largo de 4 ó 5 días consecutivos en el mes de junio (o de manera extraordinaria en el de julio) de cada año que permitirá al alumnado acceder al grado que haya elegido acorde con el itinerario cursado.

¿Cómo funciona la EvAU?

En caso de elegir el Bachillerato como camino hacia la Universidad, tanto los alumnos como los profesores, debemos tener presente la prueba desde el inicio de esta etapa ya que 1º de Bachillerato es el punto de partida del camino que lleva a la Universidad pasando por la EvAU. Es un curso en el que el alumno tendrá más tiempo y menos presión que en 2º de Bachillerato, que permite más oportunidades de demostrar su trabajo y sus conocimientos y que estos queden reflejados en la calificación final del Bachillerato. Por el contrario, 2º de Bachillerato es un curso en el que el ritmo se incrementa ya que hay que impartir temarios muy extensos en un periodo de tiempo más corto. Si la EvAU se celebra al inicio del mes de junio, los temarios de 2º deberán cerrarse a principios de mayo, lo que resta al menos un mes de curso respecto a 1º de Bachillerato. A este aspecto hay que sumar el nivel de estrés que se acumula en 2º y que, en ocasiones, dificulta el rendimiento del alumnado.

¿En qué consiste y como puntúa la EvAU?

La prueba de la EvAU se divide en dos partes: el bloque obligatorio y la fase voluntaria.

  • El bloque obligatorio consta de 4 ejercicios correspondientes a las materias de Lengua Castellana y Literatura II, Historia de España II, Primera Lengua Extranjera II (corresponde al idioma cursado en Bachillerato) y una asignatura troncal de modalidad que corresponda al itinerario cursado por el alumno en Bachillerato es decir Matemáticas II en el Bachillerato de Ciencias, Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales II en el de Ciencias Sociales, Latín II en el de Humanidades y Fundamentos de Arte II en el de Artes. Esta fase es obligatoria para los estudiantes procedentes de Bachillerato y su validez es indefinida, pero existen exenciones para titulados en técnico superior en Formación Profesional. La nota de esta prueba será la media de la nota obtenida en los exámenes de las cuatro materias. Si esta nota es mayor o igual a 4 hará media con la nota que el alumno haya tenido al final del Bachillerato (60% nota de Bachillerato y 40% nota de la prueba obligatoria). El alumno obtendrá por tanto su Calificación de Acceso a la Universidad (CAU) mediante la fórmula: CAU= 0,4 x nota de la prueba obligatoria + 0,6 x nota del Bachillerato. Esta nota será como máximo de 10 puntos. Si su valor es mayor o igual a 5 la EvAU se dará por superada y el alumno podrá solicitar plaza en cualquier enseñanza universitaria de grado.
  • La fase voluntaria permite mejorar la nota de admisión en enseñanzas de grado hasta un máximo de 14 puntos. Pueden presentarse a esta prueba estudiantes procedentes de Bachillerato y estudiantes procedentes de estudios que no necesiten realizar el bloque obligatorio, o aquellos que ya hayan superado la PAU (antigua Prueba de Acceso a la Universidad) y/o la EvAU en convocatorias anteriores. El estudiante puede presentarse a un máximo de cuatro materias y no es necesario que las haya cursado ni que pertenezcan al itinerario realizado. Puede elegir entre las materias troncales de modalidad, las de opción y una lengua extranjera diferente a la que se haya examinado en el bloque obligatorio. Las calificaciones obtenidas en los exámenes de las materias de esta fase tienen una validez para la admisión en grados durante el año que se aprueban y el siguiente. La calificación de cada materia ponderará según el grado universitario al que desee acceder el alumno, por lo que es importante que el estudiante consulte las tablas de la Universidad y esté bien informado de cómo pondera cada asignatura antes de decidir a cuál va a presentarse en esta fase voluntaria.

La asignatura troncal de modalidad de la que se examine el alumno en el bloque obligatorio es susceptible de ponderar también para subir la nota de admisión. Por tanto, podrá contar dos veces: una sobre 10 para la calificación de acceso y otra sobre 14 para la nota de admisión. Todo ello es válido en el año en el que se haya realizado el examen o en el anterior.

¿Cuánto dura la EvAU?

Los exámenes de la EvAU se reparten en cuatro días a lo largo de una semana, dejando un quinto, llamado de incidencias y coincidencias, para que se examinen aquellos alumnos que han tenido exámenes convocados al mismo tiempo o que por alguna causa contemplada en las normas de realización de la prueba no han podido hacer algún examen.

Es fundamental que los alumnos conozcan el calendario de exámenes con suficiente anterioridad para poder planificar las fechas y horas de las asignaturas a las que va a presentarse en la fase obligatoria y en la voluntaria, en caso de realizarla. En la actualidad hay que incorporar un nuevo factor a tener en cuenta en la EvAU: las medidas higiénico-sanitarias y las instrucciones para realizar el examen según la normativa anticovid. Cada universidad pone a disposición de los estudiantes estas medidas y normas en su página web. Es imprescindible consultar dicha página y comprobar que se cumple con lo indicado en cuanto al material que hay que llevar (bolígrafos, calculadoras, DNI o pasaporte…), y en cuanto a las medidas de seguridad que hay que tomar (uso de mascarillas, gel hidroalcohólico, distancias de seguridad, botella de agua). En este sentido, la normativa también aplica reglas para la entrada y salida de la universidad: es necesario llegar con tiempo suficiente para encontrar el aula y entrar por orden y sin aglomeraciones (manteniendo la distancia de seguridad) y abandonar el recinto tras terminar los exámenes evitando permanecer en los pasillos. Cuidando todos estos aspectos y preparándose con antelación, el alumno entrará al examen más tranquilo, solo con los nervios asociados a la importancia de la prueba, que ya son suficientes.

¿Cómo prepararse para la EvAU?

Como decía al principio, conocer y prepararse para la EvAU no es tarea que se deba dejar para el último mes. Hemos tratado aspectos relacionados con elegir el itinerario correcto y conocer cómo es la prueba en sí, pero no es menos importante la preparación del alumno a nivel psicológico. Desde mi punto de vista, tanto docentes como familias debemos participar en el desarrollo psicológico del alumno de cara a la prueba y ser conscientes del grado de estrés al que están sometidos, sobre todo aquellos alumnos que desean optar a estudiar grados cuyas notas de acceso son muy elevadas. Nuestra misión será poner a su disposición todas las herramientas posibles para afrontar la situación tanto desde el plano académico como desde el psicológico, buscando su bienestar tanto en el centro como en casa. El objetivo es que sean capaces de armonizar una buena calidad de vida con resultados óptimos para sus aspiraciones. Es importante que el estudiante conozca todos los aspectos relacionados con la elección de itinerarios, desarrollo de las fases de la EvAU, fechas, horarios, lugar en el que realizará los exámenes, materias de las que se examinará cada día… pero con el objetivo de que se encuentre seguro cuando llegue el momento, nunca para que se obsesione y angustie. Es cierto que en 2º de Bachillerato hacemos referencia continuamente a la EvAU, pero debemos intentar centrar la atención de los alumnos en el curso más que en la prueba en sí.

¿Cómo prepararse para la EvAU en Los Sauces?

Una actuación que he observado a lo largo de los años que beneficia y tranquiliza al alumnado de 2º de Bachillerato es la realización de los exámenes de evaluación siguiendo el formato de EvAU: utilizando el cuadernillo que van a tener que rellenar en la prueba, colocando las pegatinas con sus códigos en lugar de poner su nombre, siguiendo el modelo de examen propuesto en cada asignatura en el que se aplican los criterios de corrección propuestos por los coordinadores de las materias, empleando el tiempo reglamentario de la prueba (90 minutos)… Es decir, un simulacro de EvAU cuya misión es que cuando lleguen los exámenes reales manejen con soltura todos estos aspectos ya que en el colegio habrán tenido, al menos, tres sesiones de simulación, una por cada evaluación. Conversando con antiguos alumnos tras realizar la EvAU, me trasladaban la ventaja frente a compañeros de otros centros que desconocían cómo actuar al recibir los cuadernillos y las etiquetas y valoraban la tranquilidad que en este aspecto ellos tenían.

Comportamientos de los alumnos antes de la EvAU

Hay una serie de comportamientos que suelen repetirse a lo largo del curso en los alumnos de 2º de Bachillerato y ante los que debemos estar muy atentos desde casa y desde el colegio.

  • Los alumnos van a enfrentarse a largas jornadas de estudio y esto puede ocasionar dificultades a la hora de conciliar el sueño o provocar falta de horas de descanso al prolongar el tiempo de estudio por la noche.
  • Estas circunstancias unidas a un posible déficit alimenticio a causa de los nervios y a la falta de tiempo libre para despejar la mente y activar el organismo, pueden derivar en síntomas de estrés y cuadros de ansiedad, algo que no queremos y no debemos permitir en nuestros estudiantes.
  • Incluso existen estudios que asocian el estrés mantenido en el tiempo a deficiencias en el sistema inmunitario que favorecen la presencia de infecciones, alergias y otras alteraciones.
  • Desde hace tiempo se ha aconsejado repartir las 24 horas del día en tramos de 8 horas: uno para el trabajo, otro para dormir y un tercero para el ocio (aún recuerdo escuchar a mi profesor de Lengua del antiguo COU cuando nos lo decía). Al comentarlo en el aula con mis alumnos se llevan las manos a la cabeza ante la imposibilidad de cumplirlo. Empezamos solo con que la jornada escolar abarca casi las 8 horas algunos días, ¿significa eso que ya no deben estudiar en casa? ojalá la respuesta fuera un sí pero somos conscientes de que no.

¿Cuál es la solución? ¿Cómo adaptamos esos tramos de tiempo? Mi opinión es que cada alumno es un mundo y debe buscar en su forma de ser el mejor modo de estudiar, la forma idónea para concentrarse (lugar de estudio, ambiente…), hobbies o deportes que practicar en el tiempo libre, la alimentación más saludable para su organismo y las horas de sueño necesarias para estar bien descansado a diario. Todos estos aspectos ayudarán a canalizar las emociones derivadas de este curso tan intenso como es 2º de Bachillerato. Pero es obvio que esto no se descubre a estas alturas. Hay que empezar a buscarlo en cursos anteriores ya que encontrar las actitudes correctas requiere un sistema de “ensayo y error” para el que se requiere tiempo. Y en este aspecto la ayuda de familiares y profesores es esencial. La búsqueda del método de estudio debe partir de los cursos de Educación Secundaria en los que se pone a disposición del alumnado diferentes formas de afrontar cada asignatura: bien elaborando esquemas o mapas conceptuales, subrayando los textos con colores o elaborando apuntes en cursos más avanzados.

Está demostrado que cada alumno responde de manera diferente a cada herramienta y es conveniente que encuentre aquella que le ofrezca mejores resultados lo antes posible para llegar al último curso con mayor seguridad. Del mismo modo debe encontrar el ambiente de estudio adecuado, un lugar fijo en el que se sienta cómodo y le permita estar concentrado, sin distracciones y para ello será fundamental no tener el móvil cerca, uno de los grandes distractores de nuestros días. Podemos plantear el uso del móvil como aliciente para los momentos de descanso en el estudio, así evitamos la angustia provocada por la dependencia de consultarlo continuamente. Respecto a los hobbies o deportes; me parecen un elemento necesario en largas jornadas de estudio como es el caso que nos ocupa. La capacidad de concentración y de asimilación de conceptos es limitada por lo que es aconsejable realizar descansos periódicamente y cerrar el estudio con actividades que relajen, distraigan, entretengan y ejerciten el cuerpo entumecido tras tantas horas de estudio sentados frente a una mesa. Es importante evitar dedicar ese tiempo a “las pantallas” de móviles, consolas y ordenadores ya que no conseguiremos los objetivos buscados. Lo ideal sería practicar una actividad física que nos despeje cuerpo y mente. Cada estudiante decidirá cuáles son sus preferencias: baloncesto, natación, esgrima, baile, yoga… el alumno debe buscar desconectar del estudio, activar su cuerpo y relajar la mente. Todo ello favorecerá el sueño nocturno y la capacidad de concentración al día siguiente. Cumplir con todo lo descrito no asegura el éxito en la prueba pero aporta seguridad y serenidad ante este momento tan decisivo y en ocasiones tan estresante para los estudiantes, pero al tiempo debe ser una etapa llena de ilusión ya que es el camino que lleva a hacer realidad sus sueños, algo por lo que han luchado los últimos años de su formación. Mucho ánimo y mucha suerte a todos los que os encontráis en estas circunstancias.