Nuestros alumnos de 4º de ESO visitan el Palacio Real en su clase de Historia
Como cierre a la primera semana de Noviembre los alumnos de 4º ESO han hecho una visita muy especial al Palacio Real. Este es uno de los indispensables en el denominado Madrid de los Borbones que nos permite enlazar de manera diferente con los contenidos de la Historia Contemporánea de este curso.
El cambio de dinastía en España de los Austrias a los Borbones no sólo trajo importantes reformas políticas sino también una remodelación profunda a nivel social y artístico. A su llegada a Madrid Felipe V decidió remodelar por completo el antiguo alcázar de los Austrias para poner el Palacio Real a la altura de los grandes palacios de la época. Carlos III, quien sería el primero en habitarlo en 1764, dejó también su huella constructiva trayendo consigo desde Nápoles (donde ya había reinado como Carlos VII y construído importantes edificaciones como el Palacio de Caserta) a importantes artistas de la época que contribuyeron a edificar y decorar este imponente Palacio.
Remontando la gran escalera de entrada proyectada por Sabatini nuestros alumnos pasearon por las majestuosa Salas como la de las Columnas o el Salón del trono y visitaron algunas de las estancias reales decoradas con una exquisita decoración: pinturas al fresco de Giaquinto, Tiépolo Bayeu o Mengs, colecciones de tapices del Renacimiento, el rico mobiliario y hasta los instrumentos musicales, porcelanas, vajillas, relojes, medallas y orfebrería que son de los más hermosos ejemplos de artes decorativas de la que fue residencia real hasta el reinado de Alfonso XIII. Desde entonces el Palacio se reserva para grandes celebraciones de gala y recepciones oficiales de las cuales también nos comentaron nuestros guías cuestiones de etiqueta y protocolo así como divertidas anécdotas que nos hicieron sentir por un día como invitados de excepción.
Nuestra especial clase de Historia terminó con un paseo por la Armería Real donde pudimos admirar una de las mayores colecciones de armaduras a nivel mundial y para acabar por todo lo alto hicimos parada en el Parque de la Montaña donde, disfrutando de las vistas del Templo Debod y con la Casa de Campo al fondo, pudimos reposar los recuerdos de la visita y disfrutar de un momento de convivencia excepcional en el día a día de clases.